Cuando damos el paso de ahorrador a inversor porque hemos decidido poner nuestro dinero a trabajar, es habitual pensar en elementos como el tiempo, el riesgo, la rentabilidad o la liquidez. Factores que concluyen y esbozan qué tipo de inversor somos en un momento en concreto o, lo que es lo mismo, se encargan de identificar cuál es nuestro perfil de riesgo inversor.
Generalmente, una de las inversiones más comunes a las que el inversor suele acudir es aquella que invierte en activos tradicionales (renta variable, renta fija, planes de pensiones, depósitos, etc.), no obstante, la búsqueda de altas rentabilidades -ligada a asumir altos riesgos- que soslayen la volatilidad de los mercados ha propiciado el auge de la inversión alternativa en los últimos años.
Para algunos inversores puede suponer un fenómeno relativamente nuevo, no obstante, se remonta a la época “dorada” del private equity. Actualmente, dentro de la inversión alternativa, parece que los fondos alternativos han copado la atención de los inversores, dada la situación de otros activos tradicionales. Siendo este un interés que va más allá de ser solo una mera opción que barajar a la hora de diversificar.
Pero, ¿qué son exactamente los fondos alternativos y qué ventajas pueden aportar a una cartera de inversiones? A continuación, exploramos en detalle este tipo de vehículos de inversión y sus beneficios.
¿Qué son los fondos alternativos de inversión?
Los fondos alternativos de inversión son aquellos que se concentran en activos no convencionales, es decir, aquellos que no incluyen las típicas inversiones en acciones, bonos o efectivo. Entre los activos alternativos se incluyen bienes inmuebles, capital privado, hedge funds (fondos de cobertura), materias primas, entre otros.
A diferencia de los fondos de inversión tradicionales, estos fondos están diseñados principalmente para inversores cualificados o institucionales. Esto se debe a que suelen requerir una inversión mínima significativa y tienen características particulares, como una menor liquidez y horizontes de inversión más largos. Los inversores interesados en este tipo de productos buscan, en muchos casos, diversificar su riesgo y obtener rendimientos que no estén correlacionados con los mercados tradicionales.
Tipos de fondos alternativos
Existen diversos tipos de fondos alternativos, cada uno con su propia estructura y objetivo de inversión. Entre los más destacados se encuentran:
- Fondos de cobertura (hedge funds): Son conocidos por utilizar estrategias avanzadas, como ventas en corto, apalancamiento y derivados, para generar rendimientos independientemente de las condiciones del mercado. Estos fondos tienen un perfil de riesgo elevado, pero también ofrecen oportunidades de retorno significativas.
- Capital privado (private equity): Este tipo de fondo invierte en empresas que no cotizan en bolsa, generalmente con el objetivo de impulsar su crecimiento, mejorar su rentabilidad y, en última instancia, vender la empresa o sacarla a bolsa.
- Fondos inmobiliarios: Invierten en activos inmobiliarios, tanto comerciales como residenciales. Estos fondos suelen generar ingresos mediante el alquiler o la apreciación del valor de los bienes inmuebles.
- Inversiones en infraestructuras: En este tipo de fondos, se invierte en proyectos de infraestructuras a gran escala, como aeropuertos, carreteras o plantas de energía. Estos activos ofrecen ingresos estables a largo plazo y pueden actuar como una protección contra la inflación.
Cada uno de estos tipos de fondos presenta diferentes niveles de riesgo y retorno, lo que permite a los inversores elegir el tipo que mejor se alinee con sus objetivos de inversión.
Ventajas e inconvenientes de los fondos alternativos
Los fondos alternativos aportan una serie de beneficios que los hacen atractivos para quienes buscan ir más allá de los mercados tradicionales. Algunas de las principales ventajas son:
- Diversificación: Estos fondos permiten a los inversores acceder a activos que no están correlacionados con los mercados de acciones o bonos, lo que puede ayudar a reducir la volatilidad general de la cartera.
- Potencial de mayor rentabilidad: Las estrategias más avanzadas de los fondos alternativos, como la inversión en startups o inmuebles, pueden ofrecer retornos superiores a los de los fondos tradicionales, aunque también están asociados con mayores riesgos.
- Acceso exclusivo: Debido a los requisitos de inversión y a las barreras de entrada, estos fondos suelen estar disponibles solo para inversores cualificados, ofreciendo oportunidades que no están al alcance del público general.
- Gestión especializada: Los fondos alternativos suelen estar gestionados por expertos con amplia experiencia en su campo, lo que les permite implementar estrategias complejas adaptadas a las necesidades y oportunidades del mercado.
Como cualquier inversión, los fondos alternativos también presentan desventajas y riesgos que deben ser cuidadosamente evaluados antes de invertir. Entre los principales riesgos se incluyen:
- Liquidez limitada: Muchos fondos alternativos no permiten retiros inmediatos, y algunos requieren que el capital permanezca invertido durante varios años antes de poder recuperarse.
- Comisiones elevadas: Debido a la complejidad de la gestión y a la exclusividad de las oportunidades de inversión, estos fondos suelen tener comisiones de gestión más altas en comparación con los fondos tradicionales.
- Mayor riesgo: Los fondos alternativos pueden invertir en activos más volátiles o inciertos. Por ejemplo, en el caso de capital privado, la rentabilidad dependerá del éxito de empresas que no cotizan en bolsa, lo que aumenta la incertidumbre.
- Regulación menos estricta: A diferencia de los fondos tradicionales, los fondos alternativos no siempre están sujetos a la misma regulación. Esto significa que los inversores deben ser más diligentes al analizar las estructuras legales y financieras de los fondos en los que planean invertir.
La estrategia adecuada para cada inversor
No todos los inversores tienen las mismas necesidades ni objetivos, por lo que es fundamental que se adopte una estrategia de inversión personalizada a la hora de considerar los fondos alternativos. Algunos aspectos clave que se deben tener en cuenta incluyen:
- Objetivos financieros: Antes de invertir en fondos alternativos, es importante definir si se busca crecimiento a largo plazo, ingresos estables o simplemente diversificar el riesgo.
- Tolerancia al riesgo: Los fondos alternativos, por naturaleza, tienden a ser más arriesgados que los fondos tradicionales. Cada inversor debe evaluar su nivel de comodidad ante fluctuaciones potencialmente mayores.
- Horizonte temporal: Estos fondos suelen requerir que el capital se mantenga invertido durante periodos más largos. Por tanto, es crucial asegurarse de que no se necesitará liquidez en el corto plazo.
Capital Riesgo: sinónimo de buena salud
De entre todas las opciones disponibles en el mercado en el nicho de la inversión alternativa, los fondos de private equity o capital riesgo (FCR) han sido uno de los productos que mejor acogida han tenido en el mercado en los últimos tiempos, siendo 2021 el mejor año de su historia en el panorama nacional.
Principalmente, invierten en aquellas compañías que no cotizan en bolsa, aunque depende del tipo de activos en los que centren sus operaciones, su correspondiente riesgo.
En materia de plazo de inversión para los partícipes, el horizonte temporal de los FCR suele ser a largo plazo (3-10 años), por lo que se identifican como fondos ilíquidos -poca facilidad de que el activo se convierta en dinero efectivo en el corto plazo-. Estos se componen de dos tipos de socios, los socios generales -inversores profesionales- o los socios limitados que, generalmente, cuentan con un perfil institucional.
A la hora de operar, algunas de las clasificaciones recaen en el venture capital -invierten en start-ups-, el private equity -invierten en empresas con potencial de crecimiento o en empresas ya consolidadas con vistas a seguir creciendo, entre otras especialidades-, los fondos apalancados o buy-out -invierten en compañías ya consolidadas que necesitan mejorar su salud financiera-, los fondos de capital de expansión -compañías con gran potencial de crecimiento-, de capital privado inmobiliario o real estate private equity -se centran en activos inmobiliarios- o los fondos de cobertura o hedge funds -vehículos de alto riesgo que pueden ofrecer grandes rentabilidades-, entre otros.
Un fondo 100% ESG
En Beka Asset Management, contamos con Beka & Bolschare Iberian Agribusiness Fund (FCR). Un fondo de capital riesgo que se caracteriza por entrar en la tipología del private equity, esto es, que invierte en compañías privadas y, fundamentalmente, está destinado a gestionar plantaciones agrícolas de manera sostenible a lo largo de España y Portugal.
En cartera, sus plantaciones agrícolas están destinadas a gestionar diferentes tipos de cultivos, como son: el almendro (50-65%), la aceituna (10-20%), el aguacate (5-10%), el avellano (5-10%) y, de manera residual, otro tipo de frutos (0-5%).
Por esta razón, este instrumento cuenta con un alto compromiso ESG, por cumplir los requisitos del artículo 9 (el mayor grado de implicación en materia de sostenibilidad) del Reglamento de Divulgación de Finanzas Sostenibles de la Unión Europea (SDFR, UE 2019/2088). Por esta razón, Beka & Bolschare Iberian Agribusiness Fund (FCR) se convierte en el primer fondo de capital riesgo de España en estar inscrito en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) con esta clasificación, enmarcada en esta legislación y que se engloba dentro del Plan de acción de la UE sobre finanzas sostenibles.
Asimismo, este fondo sostenible está totalmente alineado con seis de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS): el ODS 2 (Hambre cero), el ODS 8 (Trabajo decente y crecimiento económico), ODS 13 (Acción por el clima), el ODS 6 (Agua limpia y saneamiento), el ODS 7 (Energía asequible y no contaminante) y ODS 12 (Producción y consumo responsable).
Conclusión
Los fondos alternativos de inversión ofrecen una valiosa opción para quienes buscan diversificar sus carteras con activos no tradicionales. Además de la diversificación, proporcionan oportunidades de mayor rentabilidad y acceso a inversiones exclusivas. Sin embargo, es fundamental tener en cuenta que estos fondos suelen estar dirigidos a inversores cualificados y que conllevan ciertos riesgos y desventajas, como la liquidez limitada y los costos más elevados.
Dado su perfil de riesgo más alto y su complejidad, es esencial que los inversores adopten una estrategia personalizada que contemple sus objetivos financieros, su tolerancia al riesgo y su horizonte temporal. Al hacerlo, los fondos alternativos pueden ser una herramienta poderosa para mejorar la rentabilidad y estabilidad de una cartera en crecimiento, siempre que se gestionen con cuidado y se seleccionen adecuadamente.